Tulúm tiene bellísimas playas, pero al haberse vuelto un destino de moda los servicios se han encarecido, sin que por eso su calidad haya aumentado. Por eso te invito a reflexionar sobre su conveniencia como tu próximo destino vacacional.
En la Riviera Maya se ubica una paradisíaca (y hasta hace un par de años, poco conocida) bahía. De palmeras altas y arena blanca, Túlum se ha erigido como el representante de los destinos turísticos eco-chic. Uno de los hoteles más populares de este poblado costero es Azulik, que fue lanzado a la fama mundial por los usuarios de Instagram. Su bello diseño, de madera y acabados campestres, ha generado un mar de likes, que a su vez, ha catapultado a Túlum a la cima de los destinos preferidos por los millenials.
Pero esta llegada masiva de turistas ha ocasionado una variación en la oferta y la demanda, que se ve reflejada en los precios exorbitantes que ha adquirido todo. ¿Hasta qué punto, pagar de más, es concederse un capricho personal? Una delgada linea divide la exclusividad de la estafa descarada. Bajo el concepto eco chic, en la mayoría de los hoteles de Túlum, se ofrecen servicios muy básicos (los hoteles más baratos, como Posada Margeritta, a pesar de cobrar 100 euros la noche, no te dan ni una pastilla de jabón) a precios que van desde los 90 euros la noche, hasta 1100 euros. El fotogénico paraje, cuenta indudablemente con playas de belleza incomparable, cuya visita es gratuita. Al igual que las ruinas mayas ubicadas a pocos minutos del pueblo.
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Sin embargo, el consumo de todo lo demás (comida, transporte, etc) supera el precio de los mismos en otros destinos de la Riviera Maya, como Playa del Carmen o incluso Cancún. El precio promedio para una cena es de 30 dólares por persona. A tener en cuenta también que los cajeros ubicados en el pueblo solo brindan dólares, y a veces hay que cambiarlos para pagar algunos hoteles que no aceptan sino euros. Incluso, durante el 2018, las blancas arenas de Túlum fueron afectas por el fenómeno del sargazo, que llenó las playas de algas marrones y basura.
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Sin embargo, la afluencia de turistas no ha bajado, ni tampoco los precios. Por todo esto, cabe evaluar los puntos favorables de este destino, que, sarcasticamente son gratis (la playa, las ruinas, el paisaje en general), versus los inconvenientes. Si aun así, decides escoger a Tulúm para visitar durante tus vacaciones, te recomiendo que hagas tus reservaciones con tiempo, si no quieres terminar durmiendo en la playa. Aqui te dejo unos tips para conseguir vuelos baratos, porque, créeme, en Tulúm necesitarás cada dolar.
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muy buenos datos
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